Hoy traigo aquí un tesoro, un vestido mío, Sí, este vestido me lo hizo una tía mía cuando yo tenía menos de dos años. Así que ya tiene historia.
Mi tía tendría unos veintitantos años, hoy tiene 90. Y se acuerda perfectamente de cuando me lo hizo porque lo bordaba trabajando en el campo. Llevaba el bastidor colgado en la cintura y cuando paraban a descansar bordaba. ¡Impresionante!
Está tan bien bordado, que incluso viéndolo en persona crees que son telas sobrepuestas o que las flores están pintadas. Unas puntadas tan pequeñas y todas iguales!!!!
Y la cantidad de flores, hojas y bodoques que bordó.
La tela es organdi y ya está pasadita. Pero después de tantos años, demasiado bien está.
El vestido está todo cosido a mano, incluso el filillo del volantito que tiene en la parte de abajo.
Un trabajo hecho con tanto amor que esté perdurando en el tiempo y a mí me encanta haberlo lucido.
Me siento muy orgullosa y le estoy muy agradecida a mi tita Conchi.
Solo espero que el vestido lo sigan guardando mis herederos y lo valoren tanto como yo.
¡Me encanta!
1 comentario:
¡¡Un tesoro!! eso es lo que tienes y debes conservarlo porque labores de ésta categoría ya no se ven. BESICOS.
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