Pronto llegará el calor y las flores se deshojarán, pero nos han dado tantos días de belleza que es imposible no fotografiarlas.
Nos pasamos once meses cuidándolas para luego disfrutarlas durante un mes escaso, pero vale la pena.
Y los árboles que fueron podados en enero también son dignos de admirar, cómo han brotado y con qué fuerza.
Un álamo que siempre nos da lecciones de fortaleza.
Un ciruelo que tiene muchos años y que nos ha dado pocas ciruelas, pero estamos felices de que aún siga con nosotros.
Y esta es aquella higuera a la que dejamos tiritando. Creo que hasta nos va a regalar higos! Ya os contaré,
Espero que os encontréis bien . Nosotros ahora estamos viviendo con el virus, pero estamos bien.
Os dejo un abrazo.
La flor llena el espacio de perfume;
la vela, de luz.
Ellos no hacen nada;
sin embargo,
cambian todo con su mera presencia;
su presencia misma es acción.
4 comentarios:
La naturaleza explota en estos días y es un placer vivir rodeada de ella.
Preciosas fotos.
Que haya mejoría.
Besitos
Hermoso,aquí otoño mi estación preferida,abrazos.
Qué belleza de flores!!! Mi balcón tambien es una explosión de color, adoro las plantas y flores.
Besitos fuertes
Olá
Que flores maravilhosas!
Manuela
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